Byron, lord (1788-1824) AMOR- PERRO- SALVAMENTO

Iba embarcado una vez, desde luego con su perro. Y apenas el barco salía del puerto, el perro saltó al agua. Byron se dirigió a gritos al capitán:

-¡Pare el barco! ¡Salve a mi perro!

El capitán dijo que no podía parar el barco por un perro, que no era costumbre. Que si se trataba de una persona, sí, pero de un perro…

-¿Pero por un hombre sí?

Y Byron se echó al agua. Fue en busca del perro y el barco se detuvo a rescatarlos a los dos.

Mark Twain – Seudónimo

mark_twainCuando era muy joven había sido tripulante de uno de los barcos que hacían la travesía del Misisipí. Durante ésta, era ayudante del piloto, que le hacía medir con una sonda la profundidad del agua. después, esta profundidad debía marcarla en el mapa. La profundidad mínima aceptable eran dos yardas. si el agua tenía esta profundidad, le gritada:

-¡Marca dos!

Y así, con el mapa bien marcado, podía dirigir el barco sin peligro. El grito, en la forma de hablara de allí, era: Mark twain!

Éste fue, precisamente, el seudónimo que adoptó el escritor.