La primera vez que estuvo en París dijo que la ciudad le había decepcionado. Lo dijo en rueda de prensa y el periodista de allí, orgulloso de su gran ciudad, le preguntó:
-¿Cómo es posible?
-Es muy sencillo. Lo he encontrado todo demasiado distinto de cómo yo lo describí en las primeras narraciones. La realidad ha desmentido de mi familia. “¡Si pudiera cambiarlo!”, pensaba entonces. Claro que me refería a París y no a mis narraciones.