Argentina luchaba por su independencia, cuando en febrero de 1813 tuvo el lugar el combate de San Lorenzo, donde recibió el bautismo de fuego el regimiento de granaderos creado por San Martín, entonces coronel
El combate se desarrollaba cuerpo a cuerpo, cuando una bala mató el caballo que montaba San Martín, por lo que éste se quedó aprisionado bajo la cabalgadura. Un soldado español se abalanzó había el caído, pero el granadero Baigorria lo liquidó, mientras que el sargento Juan Bautista Cabral, sin cuidar su propia vida, logró sacar de la difícil situación en que se hallaba al futuro Libertador de las naciones.