Estuvo en la Unión Soviética y fue recibido por Stalin. A su regreso, en Inglaterra le pedían detalles de la entrevista, y Shaw los daba de la hora y del sitio, sin hacer referencia a Stalin, hasta que un periodista le preguntó:
-¿Y qué puede decirnos de Stalin?
-Pues… que habla muy bien.
-pero ¿qué te dijo?
-Pues, demostró a la perfección su gran capacidad para hablar muy bien durante un buen rato, sin decir absolutamente nada.